HECHOS Y COMENTARIOS
Por José Guadalupe Montaño Villalobos


No puede haber propósito noble ni sincero interés de fortalecer el sistema educativo, cuando el camino es la confrontación y las prédicas agresivas, para tratar de minar el prestigio de un sindicato legalmente constituido, que es y debe seguir siendo, por su propio derecho y por una verdadera necesidad, actor indiscutible en lo que tiene que ver con su materia de trabajo, que es la educación pública de México, pues si se reconoce que todos los sectores de la sociedad deben contribuir a mejorar la calidad educativa, es una mayúscula incongruencia pretender debilitar al organismo que agrupa a los maestros y trabajadores de la educación. Lo que precede viene a cuento, pues una vez más, la organización denominada Mexicanos Primero y los promotores del documental De Panzazo, entre otras voces de similar naturaleza, se rasgaron las vestiduras y pusieron el grito en el cielo acusando al SNTE de todos los pecados del mundo, con motivo de los acuerdos que aprobó la citada organización sindical en la reciente sesión del Consejo Nacional, en relación con el Programa de Evaluación Universal.
Cabe recordar, que a solicitud de la dirigencia del gremio magisterial, en cumplimiento de un mandato del mencionado órgano de gobierno sindical, el miércoles anterior, el Secretario de Educación Pública, doctor José Ángel Córdova Villalobos y el Secretario General Ejecutivo del SNTE, profesor Juan Díaz de la Torre, encabezaron una reunión de trabajo para abordar distintos aspectos relativos a este tema, en la que el líder sindical ratificó el compromiso de los docentes con una Evaluación Universal justa, equitativa y apegada al Acuerdo firmado el 31 de Mayo de 2011, por lo que no es verdad que el sindicato se oponga a la Evaluación, pues fue la propia organización la que hizo la propuesta para que se realizara.
No obstante lo anterior, importa subrayar que en la reunión aludida, los dirigentes del SNTE hicieron una serie de precisiones en las que presentaron los incumplimientos de la SEP en lo que concierne a la Evaluación Universal, entre los que destacan los que a continuación se describen.
En primer lugar, el profesor Juan Díaz de la Torre señaló que la Evaluación Universal no es una prueba, no es un examen, pues claramente quedó establecido en los lineamientos que la regulan, que dicha Evaluación es diagnóstica, por lo que no tiene relación con las condiciones de trabajo y, por ende, respeta los derechos laborales de los trabajadores de la educación.
Los objetivos tampoco dejan lugar a dudas, ya que en los mismos lineamientos se precisa que son obtener un diagnóstico integral de los participantes con base en los resultados de las competencias profesionales y aprovechamiento escolar de los alumnos, con fines estrictamente formativos, para generar estrategias pertinentes y oportunas que mejoren el logro educativo de los alumnos y el desempeño profesional de los docentes en las escuelas públicas y privadas.
Adicionalmente, servirá para orientar y consolidar la calidad y la pertinencia, tanto de los programas académicos de educación básica y normal, como el diseño y desarrollo de políticas educativas para que tengan el efecto deseable en el aprendizaje de los alumnos, en el desempeño de los docentes y en la calidad del sistema educativo.
Por su parte, la profesora Silvia Luna Rodríguez precisó varias insuficiencias atribuibles a la SEP, como son las siguientes:
En el ¿qué se va a evaluar?, el maestro tiene derecho a saber que se evaluará lo que sabe en relación a los planes y programas, pero esos planes y programas apenas fueron entregados durante el mes de marzo de este año, cuando el ciclo escolar inició a finales del mes de agosto.
Asimismo se evaluará cómo enseña, pero el referente es la Reforma Integral de Educación Básica, que es una reforma de educación primaria y apenas en la última semana del mes de marzo se concluyó la capacitación para los maestros de tercero y cuarto, a nivel de capacitadores nacionales, cuya capacitación se replicará por parte de ellos en cascada a los maestros del país, por lo que todavía no se puede considerar que ya se llevó a cabo esa actualización de los procesos que están en marcha.
En lo que tiene que ver sobre el qué hacer con los resultados, la SEP informa que el 17 de febrero se entregaron al SNTE los trayectos formativos, sin embargo la profesora Luna expuso que hay una confusión, pues reconoce que sí les entregaron estas propuestas para el Programa de Carrera Magisterial, pero no para el Programa de Evaluación Universal.
Otra cuestión es que el Instituto Nacional de Evaluación Educativa sea el encargado de elaborar los instrumentos de evaluación y que, mientras tanto, se promueva que éste sea un órgano independiente del sindicato y de la secretaría, en donde se garantice la autonomía del instituto, además de que se cuente con la solvencia para la formación continua de los profesores. Esto fue planteado por el SNTE desde el 15 de mayo del año pasado.
En lo que hace a los 400 millones de pesos que dice la SEP se aplicarán este año para el Programa, la profesora Luna expresa que esa cantidad, prevista para la formación continua, no es solamente para atender al Programa de Evaluación Universal, sino para que la Secretaría cumpla con su obligación de brindar formación continua a todos los docentes, incluidos los más de 500 mil maestros que están en el Programa de Carrera Magisterial.
La profesora Emma Rubio manifestó en su turno, que el Programa de Evaluación Universal tiene su fundamento en los acuerdos firmados, pero también en la Ley General de Educación, de donde se derivan los Programas de Capacitación, Actualización, y Superación Profesional del magisterio.
En su oportunidad, el profesor Alfonso Cepeda Salas hizo énfasis en el hecho evidente de que en los trabajadores de la educación básica y de todos los niveles hay confusión, hay incertidumbre, hay desconfianza en cuanto a los efectos que pueda tener la aplicación de la Evaluación Universal, lo que se agrava con las desafortunadas y equivocadas declaraciones de funcionarios de educación, que han hablado de que la Evaluación Universal es importante porque ayuda a que puedan asignarse las plazas a los más aptos, lo que es un error elemental, que se dio medularmente porque la SEP, ha tenido incumplimientos e insuficiencias en el desempeño de su función de instancia rectora del Programa y responsable de formular las estrategias para la difusión integral de todo lo relacionado con la Evaluación Universal.
Por ello, es de esperarse que tengan resultados positivos las reuniones que se están llevando a cabo del Grupo de Trabajo de Evaluación Universal, a fin de que se superen las diferencias y se tomen los acuerdos pertinentes, que se remitan de inmediato a la Comisión Rectora de la Alianza por la Calidad de la Educación, para que ésta, a su vez, los presente a los titulares de la Secretaría de Educación Pública y del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, con el objeto de seguir adelante con el proceso de la Evaluación Universal.