México, D. F., 11 de diciembre de 2011. Con un reconocimiento a la unidad y la democracia que se vive al interior del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, se llevó a cabo este fin de semana el XIX Congreso Extraordinario de la Sección 10, para renovar a su Comité Ejecutivo Seccional, que en representación de la Presidenta Nacional del SNTE, maestra Elba Esther Gordillo y del Secretario General Ejecutivo, profesor Juan Díaz de la Torre, fue presidido por el profesor José García Mora, quien dirigió un mensaje en la ceremonia de inauguración en el que señaló que el SNTE, es un ejemplo del sindicalismo moderno, ya que su norma estatutaria contempla los valores universales de la democracia: pluralidad, tolerancia, inclusión, diálogo, acuerdo, transparencia y rendición de cuentas. Por su importancia, a continuación, el discurso del representante del Comité Ejecutivo Nacional del Sindicato en el congreso mencionado.

México, D. F., 7 de diciembre de 201.

Muy buenos días a todas y a todos, con el permiso de mis compañeros Silvia Luna y Alejandro Soto saludo a todos los presuntos delegados aquí presentes, destacando la presencia de nuestro compañero Agustín Avilés Noguera, Secretario General del Comité Ejecutivo de la Sección 10 del SNTE;

Saludo al maestro Noé Rodríguez García, presidente del Comité Electoral Nacional y a nuestro amigo Bernardo Quezada, presidente colegiado de la FEDESSP.

Saludo también con mucho respeto a mi compañero y amigo profesor Sergio Esquivel, ex Secretario General de la Sección 10, bienvenido.

Compañeras y compañeros presuntos delegados a este XIX Congreso Seccional Extraordinario:

En su etapa moderna, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación ha efectuado sendas reformas democráticas que han revolucionado su vida interna, impactado en el movimiento sindical mexicano e influido en la transición democrática del país.

Adelantándonos a los reclamos democráticos de la sociedad, en los albores de 1990 instituimos en nuestra norma, práctica y cultura sindical, los valores universales de la democracia: pluralidad, tolerancia, inclusión, diálogo, acuerdo, transparencia y rendición de cuentas.

Establecimos, asimismo, el voto directo y secreto para la elección de dirigencias, creamos órganos de gobierno plurales donde se expresan sin cortapisas todas las corrientes sindicales que profesan diversas convicciones ideológicas y reivindican múltiples visiones políticas; legitimamos el principio de proporcionalidad en la composición de los órganos de gobierno delegacionales, seccionales y nacionales.

Justo cuando la ciudadanía exigía al sistema político procesar hondos cambios democráticos, en el SNTE decidimos dar un salto cualitativo orientado a dar vigencia a la diversidad, pluralidad, la libertad política e ideológica de los trabajadores de la educación.

A efecto de consolidar nuestra democracia interna, a principios de la primera década del siglo XXI estatuimos los mecanismos de democracia directa complementados con el fortalecimiento de la transparencia, la fiscalización y la rendición de cuentas en todos los ámbitos.

Pero más allá de los límites gremiales, de las modificaciones normativas, del perfeccionamiento de los métodos de elección y de los instrumentos que alientan la participación directa, un eje fundamental de nuestra estrategia ha consistido en la apropiación y el enaltecimiento de nuestra materia de trabajo.

Esto explica que hoy estemos inmersos en una movilización nacional a efecto de que, entre todos, concretemos una revolución educativa centrada en la calidad de la enseñanza y de los aprendizajes.

Esto explica que con el 5º Congreso Nacional de Educación y el 3er. Encuentro Nacional de Padres de Familia y Maestros, estemos generando espacios de diálogo, de reflexión, de intercambio de experiencias y de construcción de propuestas comunes, en torno a los grandes retos que enfrenta la educación pública y el propio sistema educativo.

Si realmente queremos alcanzar niveles crecientes de competitividad económica, de bienestar social, de gobernabilidad y un mejor sistema de procuración e impartición de justicia, resulta urgente realizar las reformas que requiere el país, señaladamente, en lo relativo al cambio cualitativo y equitativo de la educación.

Precisamente por estas razones, ambos eventos están recabando la opinión y las propuestas de las maestras y maestros de México, de las madres y padres de familia, de los integrantes del mundo de la investigación científica y tecnológica, de reconocidos académicos, especialistas e intelectuales, convencidos de que la suma de talentos y el consenso democrático nos permitirá formular una propuesta que haga viable la hazaña educativa a la que aspiramos.

Afirmamos categóricamente que esta hazaña educativa de lograr una educación y un sistema educativo de clase mundial, es imprescindible que los distintos actores construyamos un proyecto educativo común, que ayude al país a competir ventajosamente en las grandes transformaciones económicas que ocurren en el mundo global y a superar las desigualdades sociales que nos laceran.

Con hechos como éstos, con propuestas de renovación de los contenidos curriculares, de la formación, actualización y capacitación de los docentes, de los materiales didácticos que emanan de quienes cotidianamente intervenimos en el proceso enseñanza aprendizaje, es como desmentimos a quienes por omisión o comisión acusan al magisterio y al SNTE de ser obstáculos para la calidad de la educación.

Pero los hechos están a la vista. Nuestra organización sindical incentivó y respaldó la creación del Instituto Nacional de Evaluación Educativa; propuso el establecimiento de los exámenes nacionales como método para la admisión y promoción del personal docente; activó los cambios legales que establecen la obligatoriedad de la educación preescolar y la obligatoriedad de la Federación para destinar un monto equivalente al 8% del PIB a educación y desarrollo científico y tecnológico.

Estas evidencias demuestran, asimismo, que gracias a la vocación, a la experiencia y a la calidad profesional del magisterio, los alumnos de las escuelas públicas del Distrito Federal ocupan el primer lugar nacional en los resultados de Ciencias, Lectura y Matemáticas de la Prueba PISA aplicada en el 2006 y 2009, respectivamente.

Para que tengamos una educación de alta calidad, con equidad y pertinencia, empero, una condición fundamental es que la prioridad que las instituciones de la República le otorgan en el discurso, se traduzca en acciones tangibles y verificables.

¡En materia educativa no se puede avanzar hacia el futuro dándole la espalda a la realidad!

Por ello, frente al Decreto de Presupuesto de Egresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal 2012, el SNTE manifiesta su inconformidad porque los recursos asignados al sistema educativo, al desarrollo científico y tecnológico, al fomento de la cultura y las bellas artes, están muy lejos para avanzar en el cumplimiento de lo establecido por el Artículo 25 de la Ley General de Educación.

Si México realmente quiere lograr la excelencia educativa y desempeñar un rol estelar en el concierto de los países más desarrollados y en la llamada sociedad del conocimiento, difícilmente puede hacerlo reduciendo el financiamiento a la educación básica, a las escuelas normales, a las universidades e instituciones públicas de educación superior y de postgrado.

Compañeras y compañeros congresistas:

En este magno XIX Congreso Seccional Extraordinario, en uso de sus libertades, elegirán a quienes juzguen que tienen los méritos suficientes para representarlos dignamente; y es en este máximo órgano de gobierno donde se pueden hacer valer los principios y valores democráticos que nos unen en la discusión de los temas sustantivos del magisterio y del SNTE.

Sabemos perfectamente que una de las reglas de oro de la democracia es el de la mayoría, así como la combinación dialéctica del acuerdo y el disenso. Pero esa mayoría de ninguna manera debe significar el atropello de los derechos de las minorías, de ninguna manera debe traducirse en hegemonías indiscutibles o en la imposición de una especie de pensamiento único.

Por el contrario, significa también la inclusión, la formación de pesos y contrapesos, porque una organización plural y diversa como la nuestra, debe hacer honor a su característica fundacional.

Asimismo, en una comunidad democrática, el disenso siempre encontrará cauces institucionales para su procesamiento; pero, tampoco debe significar la cancelación del diálogo, del consenso o el recurso de la intransigencia. Estoy seguro de que aquí en este Congreso hay talento, experiencia, sensibilidad y visión suficiente para entender que nuestra organización es muy generosa y sabe reconocer el esfuerzo de quienes nutrimos su unidad y cohesión nacional.

Ante la renovación del Comité Ejecutivo Seccional, quiero manifestarles que es legítimo que declaren su simpatía por una o un aspirante a la Secretaría General, porque forma parte de un sano proceso democrático que nutre la unidad del SNTE. La única condición es que se apegue a los principios de legalidad, civilidad, tolerancia, transparencia, diálogo e inclusión establecidos en nuestra norma estatutaria.

Los exhorto muy respetuosamente a que en esta fiesta de la democracia, pongamos por encima de cualquier interés personal, por legítimo que sea, el interés superior de nuestra organización sindical, de la educación pública y de la nación mexicana.

Amigas delegadas y amigos delegados a este Congreso Seccional Extraordinario:

Por mi conducto, reciban el afecto y los mejores deseos de éxito, que les hace llegar nuestra líder nacional, la Maestra Elba Esther Gordillo y nuestro Secretario General Ejecutivo, el Profesor Juan Díaz de la Torre.

En el Comité Ejecutivo Nacional, hacemos votos para que este Congreso sea una genuina lección de democracia y civilidad.

En hora buena compañeras y compañeros , entremos a construir la unidad, entremos a construir la responsabilidad y deseo el mejor de los éxitos en el Congreso.

Muchas gracias.